lunes, 28 de noviembre de 2011

Macri, por las demoliciones sin límites legales

El jefe de Gobierno quiere librarse de la legislación que limita la industria inmobiliaria. Y llega hasta la picaresca trampeando en los horarios de las reuniones.
Antes de comenzar su segundo mandato, Mauricio Macri decidió sacarse de encima un tema que molesta a la industria de la construcción. En apenas diez días, el bloque del PRO en la Legislatura porteña tomó dos iniciativas particularmente agresivas contra la legislación que protege el patrimonio edificado de Buenos Aires y frena las demoliciones. Débil y contradictoria como es, esta legislación ya está afectando la plena libertad con que se demolía en la ciudad. Este viernes, los diputados oficialistas que revistan en la Comisión de Planeamiento legislativa montaron una suerte de comedia de errores para evitar que se renueve la ley 3056. Lo hicieron hasta trampeando en los horarios para evitar que la oposición estuviera siquiera presente en la reunión de comisión.
La ley que irrita al macrismo nació hace cuatro años como una salida de compromiso a la naciente crisis por el patrimonio edificado porteño. Recién asumido, el macrismo se encontró en diciembre de 2007 con una movilización cada vez más evidente sobre el tema. La solución, propuesta por la entonces diputada Teresa de Anchorena, fue crear un régimen especial, por un año y en una zona parcial de la ciudad, que obligaba a un trámite especial a la hora de demoler cualquier cosa anterior a 1941.
Al año siguiente hubo que renovar la ley, que fue extendida a toda la Ciudad, acto que se repitió sin sobresaltos cada año. Hasta comenzó a considerarse tradicional que la renovación de la ley, cada año con un número diferente, quedara siempre para la maratónica sesión final del período ordinario. En lo que va del mes, Página/12 había recibido varias seguridades de que el trámite nuevamente sería rutinario.
Resulta difícil exagerar la importancia de la ley 3056, que funciona en definitiva como el único freno posible a la destrucción “por ventanilla” del patrimonio porteño. Bajo su amparo, todo pedido de demolición de edificios construidos hasta 1940 inclusive tiene que ser girado al Consejo Asesor en Asuntos Patrimoniales, una entidad que –como indica su nombre– tenía ante la plácida tarea de asesorar el ministro de Planificación Urbana en esos temas. Pero el Consejo recibió el poder de vetar las demoliciones, caso en el que el expediente debe ir a la Legislatura para que se vote su catalogación o se lo descarte y pueda ser demolido.
El Consejo nunca se destacó por su rigor, sigue funcionando dentro de un ministerio porteño muy afín a la industria de la construcción y está lleno de funcionarios que obedecen al macrismo. Pero su mera existencia frenó la demolición de cientos de edificios y creó dudas donde antes se sabía que cualquier pieza del patrimonio porteño podía ser destruida sin más. Si la ley no se renueva, el Consejo pierde sus poderes y la situación revierte a 2007, cuando se demolía libremente.
Para que los diputados traten con su voto un proyecto de ley, éste tiene que pasar por un trámite previo. En este caso, debe ser tratado en dos comisiones, la de Planeamiento y la de Cultura. Este viernes tocaba a Planeamiento verlo en su temario del día, y ahí comenzaron las cosas raras. La primera fue un cambio de horario que hizo que la reunión coincidiera con otras ya programadas. Los miembros de la oposición avisaron que llegarían tarde porque los esperaban en la reunión de Presupuesto. Puntualmente, llegaron los miembros por el PRO, con Christian Ritondo a la cabeza y, por fuerza de número, con quórum propio. En la reunión había representantes de Basta de Demoler, Proteger Barracas, Protocomuna Caballito y otros grupos barriales y hasta estaba Anchorena. Los macristas firmaron varios proyectos a tratar, incluyendo el que crea una zona de amortiguación en San Telmo para que no tengan que coexistir torres y casas coloniales. Y súbitamente, en un movimiento coordinado, se levantaron y se fueron, dejando sin firmar el crucial proyecto de renovación de la ley. Sólo el saliente Patricio Di Stefano, que preside la Comisión de Patrimonio de la Legislatura, se animó a firmarla.
Los vecinos no salían de su asombro y los diputados opositores, cuando llegaron finalmente, no podían contener su furia. Sergio Abrevaya, Eduardo Epzsteyn y Juan Cabandié reclamaron a la presidenta de la comisión, Silvina Pedreira, por la evidente trampa. Pedreira se negó a reabrir el debate, mientras la directora de la comisión, Bárbara Rossen, comentaba abiertamente su acuerdo con “tumbar” una ley “que no me gusta”.
La salida de Ritondo y los suyos no fue discreta, por los vecinos que lo rodeaban. Uno de ellos, con cierta relación con uno de los macristas, le preguntó por qué hacían algo así en lugar de debatir y buscar los votos. “Porque lo ordena Macri –fue la dura respuesta–, se quiere sacar el tema de encima.”
Quienes presenciaron la chicana macrista no pudieron evitar relacionarla con la presentación, el jueves 17, de un proyecto de ley que descabeza de hecho otra comisión dedicada al patrimonio. En este caso fue el turno de la Comisión para la Preservación del Patrimonio Histórico Cultural, un ente mixto del Ejecutivo y el Legislativo que tiene asiento en el CAAP y que en los dos últimos años se transformó en una molestia por sus reclamos ante las irregularidades con que se permiten demoliciones. Una tradición es que, ya que el Ejecutivo nombra a miembros obviamente oficialistas para esta comisión, su secretaría general queda para la oposición, ejercida hasta fin de año por la kirchnerista Mónica Capano.
Hace diez días, el macrista Di Stefano presentó un proyecto para nombrar a su propio jefe de asesores como nuevo secretario general y a otros tres macristas como vocales y suplentes. El proyecto iba a ser votado este jueves, pero tuvo que ser pospuesto por la oposición de las asociaciones patrimonialistas y la mala recepción que tuvo la idea hasta en el mismo PRO.

Fuente: Pagina/12, Domingo 27 de noviembre de 2011

viernes, 18 de noviembre de 2011

El jefe de Gobierno, primer trabajador

Una ONG inició una causa porque Macri se negaba a responder sobre sus días de descanso. Las cuentas de la oposición son diferentes. La legisladora Gabriela Cerruti denunció que el jefe de Gobierno estuvo “un tercio de su mandato” fuera del país.
Se supo: Mauricio Macri finalmente dio a conocer la cantidad de días que se tomó de vacaciones. Según el jefe de Gobierno, en los primeros tres años de su gestión estuvo fuera del país 82 días, pero sólo 38 de ellos fueron por “motivos principalmente de índole personal”. Es menos de un tercio de lo que calcularon sus opositores. Macri no entregó este dato en forma voluntaria sino tras ocho meses de resistirse a los fallos judiciales que le ordenaban dar esta información pública. La Ciudad debió pagar las costas de ese juicio, ante la reticencia del funcionario a contestar la simple pregunta que le formulaba la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ). Tal vez pensando en su segundo mandato, en un encuentro en la UADE, Macri llamó a “recuperar la cultura del trabajo”.
El 2 de marzo de 2010, la ONG le pidió al jefe de Gobierno que le respondiera la cantidad de días de vacaciones que se tomó. Cuando se negó a contestar, ACIJ inició una causa en el fuero Contencioso Administrativo por derecho a la información. El 26 de abril de este año, el juez Hugo Zuleta falló a favor de ACIJ y le ordenó a Macri entregar en cinco días la información solicitada. Nada de eso ocurrió: el gobierno porteño siguió peleando para no contar en público cuántos días de vacaciones se tomaba Macri. La Cámara en lo Contencioso Administrativo advirtió que la apelación no cumplía con los requisitos mínimos de una argumentación y ordenó cumplir el fallo el 25 de agosto.
Finalmente, el gobierno porteño informó al tribunal que “desde el inicio de la gestión (10 de diciembre de 2007) hasta el año 2010, el jefe de Gobierno se encontró de viaje durante 82 días hábiles en total”. “De esos 82 días, 44 días correspondieron a viajes oficiales y 38 a viajes realizados por motivos principalmente de índole personal, aun cuando en su vida personal se encuentra investido por el rol de jefe de Gobierno”, afirmó el abogado que representaba al funcionario PRO. Estos 82 días los discrimina de la siguiente manera:
- 2008: 19 días hábiles (12 oficiales, 7 de vacaciones).
- 2009: 34 días hábiles (13 oficiales, 21 de vacaciones).
- 2010: 29 días hábiles (19 oficiales, 10 de vacaciones).
Es fundamental el uso de la palabra “hábiles”, puesto que podría dar a entender que Macri piensa que sólo es jefe de Gobierno de lunes a viernes en horario de oficina. Este diario reveló en enero de 2009 que, como modus operandi, el líder de PRO solía escaparse en secreto en su jet privado un jueves y volver al lunes siguiente. Con ese método había acumulado en su primer año 33 días de vacaciones.
En ese momento, desde el gobierno porteño enviaron una carta a Página/12 en la que desmintieron cuatro de esos días. Restaban los otros 29, que no se condicen con los siete días hábiles que informa Macri (aquella vez, desde la gestión PRO, sugirieron descontar “los fines de semana y el receso de fin de año”). Vale la pena recordar algunos casos: el 20 de noviembre de 2008, un jueves, Macri viajó en un vuelo de LAN hacia Estados Unidos. Volvió el lunes siguiente. El 30 de noviembre salió en un viaje oficial a Italia, pero primero se tomó unos días con su novia de entonces, Malala Groba, en Miami. El 31 de diciembre se fue otros cinco días a Punta del Este por el fin de año. Esto se repitió el 9 de enero de 2009 y el 16 de enero, cuando eligió como destino Río de Janeiro. La frutilla del postre fue el 22 de enero de ese año, otro jueves, en el que Macri viajó en su jet a Chile, donde Sebastián Piñera lo recibió en su helicóptero privado. Juntos partieron al Parque Tantauco, una isla de ensueño de la que el actual presidente chileno compró una parte (apenas 118 mil hectáreas).
Los 82 días que finalmente declaró Macri se quedan algo cortos con respecto a lo que denunció en 2010 la legisladora de Nuevo Encuentro, Gabriela Cerruti, quien afirmó que Macri estuvo “un tercio de su mandato” fuera del país. La diputada contó más de un centenar de días de viaje que ella consideró que se camuflaban como viajes oficiales. Y se preguntó por qué motivo un jefe de Gobierno necesita estar tanto tiempo fuera del país.
En el escrito que presentó el gobierno porteño no se contentaron con informar los días, como le venían exigiendo los fallos judiciales desde fines de agosto. También afirmaron que Macri nunca se toma vacaciones, porque es un funcionario electo y siempre está pensando en los porteños: “Resulta sumamente dificultoso diferenciar el ámbito personal del institucional o político. Es una ingenuidad pensar que una ‘licencia’ o ‘vacaciones’ del funcionario cuya responsabilidad es la dirección política de una ‘Ciudad-Estado’ de la magnitud de Buenos Aires le permita la abstracción de sus funciones como lo puede hacer un jefe de departamento o un director de la Administración”, se lee en el texto presentado por el abogado de Macri. Así, mientras toma sol en Punta del Este, Macri no cesaría de preocuparse por dónde se hará el próximo doble carril. Sus escapadas a Estados Unidos para esquiar también irían acompañadas de una profunda meditación sobre los controles a las obras en la Ciudad.

Fuente: Pagina/12, viernes 18 de noviembre de 2011

jueves, 10 de noviembre de 2011

Son 102 los parques y plazas donde quieren instalar bares

El PRO reflotó con cambios una iniciativa rechazada en 2008. Permitirían dos locales de hasta 20 m2 en cada espacio verde, con mesas y sillas. Los concesionarios podrían pagar con obras y servicios. Sería a cambio de un canon y mantenimiento
El Gobierno de Mauricio Macri presentó el proyecto en la Legislatura en 2008, a poco de asumir, pero debió retroceder rápidamente, ya que no solamente hubo rechazo de la oposición sino que también se plantearon dudas en el propio bloque del PRO. Ahora, tras el fuerte apoyo que recibió en las elecciones de julio, el macrismo retoma la idea: quiere otorgar concesiones en parques y plazas de la Ciudad para que se instalen bares y confiterías , operados por empresas privadas.
El nuevo proyecto lleva la firma del jefe de la bancada de diputados del PRO, Cristian Ritondo, y es presentado como “un mecanismo de colaboración conjunta entre el Estado y los particulares”, con el objetivo de “incrementar los servicios que se ofrecen en las plazas, para que el vecino pueda disfrutarlas con mayor comodidad”. Entre los puntos más destacados figura que los bares y confiterías deberán contar con baños “de acceso público y gratuito”, mantenidos por los concesionarios.
El canon a pagar por los adjudicatarios debería ser fijado por el Gobierno porteño, pero en el artículo 3 del proyecto se contempla la posibilidad de que no sea en dinero, sino en obras y servicios para el espacio verde.
En 2008, diputados de la oposición cuestionaron lo que calificaron como un intento de privatizar el espacio público , costo político que tampoco querían pagar varios legisladores del PRO.
Entonces, muchos criticaron que el proyecto de ley no ponía límites prácticamente de ningún tipo: ni en cuanto a los parques y plazas que se podían concesionar, ni en cuanto al espacio que podían ocupar los bares y tampoco con respecto a las características edilicias.
Por ese motivo, el proyecto que acaba de presentar Ritondo reglamenta todos los detalles, hasta el extremo de establecer que la mostaza y el ketchup no podrán ofrecerse en pomos sino en sachets individuales.
Pero tal vez lo más importante es que el anexo del proyecto fija cuáles son las plazas en las que se podrán poner bares o confiterías. La lista es de 102 nombres . Incluye al Jardín Botánico y a los parques más grandes y más tradicionales de la Ciudad, como el Tres de Febrero, Chacabuco, Centenario, Lezama, Patricios, Rivadavia, Avellaneda y Los Andes. También a algunas de las plazas que más gente atraen los fines de semana, como la de Barrancas de Belgrano e Irlanda, en Gaona y Donato Alvarez, y hasta la Plaza Lavalle, frente a Tribunales. También se incluyen espacios verdes más chicos, como a la plaza Tupac Amaru (hasta el mes pasado, de los Virreyes) donde está la terminal del subte E, y la plaza del Angel Gris, que homenajea a Alejandro Dolina, en Avellaneda y Donato Alvarez.
En el texto también está específicamente determinado el tamaño de las edificaciones: podrá haber hasta dos locales en cada plaza o parque, con una superficie máxima de 20 metros cuadrados cada uno. Ese metraje no incluye la superficie en la que se podrán colocar mesas al aire libre.
Por lo demás, se reglamentan detalles que tienen que ver, por ejemplo, con la iluminación de los locales: “se hará por luz solar, siempre que sea posible; cuando se necesite emplear luz artificial, ésta deberá ser lo más semejante a la natural”.
“Los parques y las plazas son el espacio público por excelencia para el encuentro. Y se trata de que cada vez ofrezcan más servicios para que la gente las pueda disfrutar”, dijo Ritondo.
El proyecto recién se está comenzando a discutir formalmente en la comisión de Protección y Uso del Espacio Público, en la que no están representados todos los bloques de la oposición. De todas maneras, ya se expresaron rechazos ( ver Críticas...) : Rafael Gentili (Proyecto Sur) hizo una advertencia con la cual, en voz baja, acuerdan algunos macristas: “la Constitución porteña le adjudica la competencia sobre los espacios verdes a las Comunas, por lo que éstas van a tener que intervenir”.

Fuente: Clarin, jueves 10 de noviembre de 2011

Que piensan los docentes?

Testimonios de docentes de la Ciudad de Buenos Aires en contra del Proyecto de Ley sobre el Nuevo Sistema de Clasificación y Designación Docente que se debate en la Legislatura. El proyecto de Ley fue presentado por 7 legisladores y cuenta con el apoyo del Ministerio de Educación porteño.
Entrevista a docentes que opinan sobre el proyecto de anular las juntas de clasificación. Grabado y editado por los Maestros y Maestras del D.E. 15


Los 23 derrumbes que hubo en la Capital

De 2008 a la actualidad hubo en la Ciudad de Buenos Aires 23 derrumbes que provocaron 9 muertos.
Los legisladores de la oposición denunciaron que hubo al menos 23 derrumbes en la Ciudad de Buenos Aires, desde 2008.
Los detalles de cada derrumbe:

4/11/11 Edificio en Bartolomé Mitre al 1200

01/10/11 Caballito, Directorio 428. Un muerto. La víctima, de 23 años y nacionalidad paraguaya, fue aplastada al ceder el techo de una edificación que estaba por ser demolida. La obra había sido denunciada por la UOCRA, debido a incumplimientos en las normas de seguridad.

12/08/2011 Barracas, Escuela n°3 B. Irigoyen. Ubicada en Montes de Oca al 400. Los cielorrasos de 4 aulas del establecimiento educativo se derrumbaron.

12/08/2011 El capataz de una obra en construcción sufrió heridas al quedar atrapado por el derrumbe del encofrado, en el barrio de Floresta. El hecho ocurrió por la tarde, en Campana y Bacacay, cuando los operarios intentaban llenar con hormigón la losa de un primer piso, justo después de la tormenta que se abatió sobre la Ciudad. Cuando cargaban el material, el encofrado se desmoronó y el hombre quedó cubierto de cemento líquido, escombros y maderas.
13/04/2011 Lafinur 3000, se desmoronó una medianera. 3 heridos. Según la Agencia de Control porteña la obra tenía "todos los papeles en regla".
12/2/11 - Báez al 500. Una grúa, de 35 metros de alto y 60 toneladas, cayó sobre tres edificios en Las Cañitas. Destrozó departamentos y provocó daños a vecinos de varias propiedades.

19/01/2011 Una pared medianera, ubicada en la calle Arismendi al 2500, cedió en el barrio porteño de Parque Chas. Los vecinos de la zona habrían llamado a la policía para denunciar la inestabilidad de la obra, pero aseguraron que fueron ignorados.
4/1/11 - Lacarra y Riestra
Murió un obrero de 32 años, que estaba en el interior de una zanja que se desmoronó por las vibraciones de un tractor en una obra.
Fines de Agosto del 2010 El derrumbe tuvo lugar en Roosevelt al 5000, casi esquina avenida Triunvirato, en el mismo barrio donde ocurrió el derrumbe de un gimnasio.

10/09/2010 Boliche Beara: En Scalabrini Ortiz 1638. Dos muertos, 36 heridos.

11/08/2010 Una obra en construcción se desplomó este jueves en Villa del Parque y provocó heridas a una nena. Fue en Álvarez Jonte y Condarco.

08/08/2010 Derrumbe en un gimnasio ubicado en la calle Mendoza 5030. 3 muertos

19/7/2010: Tres pisos de un edificio que estaban siendo refaccionados se derrumbaron en la esquina de las calles Viamonte y Esmeralda, en pleno centro porteño, pero los escombros desprendidos no provocaron lesiones a las personas que pasaban por la zona a pie o en vehículos.

22/03/10 El derrumbe de una medianera de una obra en construcción provocó destrozos en una casa en la calle José Mármol al 800, en el barrio porteño de Boedo. El hecho ocurrió por la noche y, a pesar de que la familia se encontraba comiendo en ese momento, ninguna persona resultó herida.

El 5/03/2010, en Caballito, se derrumbó la medianera de un edificio lindero a una obra en construcción, en San José de Calasanz 638, sin causar víctimas.

3/1/2010: un local comercial que estaba siendo refaccionado se derrumbó pero tampoco causó heridos en el cruce de las avenidas Alvarez Thomas y Jorge Newbery, en el barrio de Colegiales.

19/12/2009: seis personas resultaron lesionadas al desplomarse el techo de una obra en construcción en la que estaban trabajando, en Mataderos. El desmoronamiento de la losa fue adjudicado por el gobierno de la Ciudad al fuerte temporal de viento y lluvia que se registró ese día en el área metropolitana.

16/12/2009: en el barrio de Villa Crespo, un hombre murió y otro sufrió heridas al derrumbarse la losa de una antigua vivienda que era refaccionada en la avenida Córdoba al 4100, casi esquina Pringles.

27/10/2009 Un obrero murió ayer al caer una medianera, en una obra en construcción, en el barrio porteño de Almagro, informaron fuentes policiales y del Gobierno porteño.
El accidente se produjo en una obra en construcción ubicada en Sánchez de Loria 1100, al caer la medianera, lo que causó la muerte de Gustavo Silvero Lescano, de 28 años, soltero y de nacionalidad paraguaya, precisaron las fuentes. Las denuncias por incumplimiento y las correspondientes solicitudes de inspección por parte del organismo oficial fueron presentadas por la UOCRA con fecha 14 de agosto y 22 de septiembre del año en curso", precisó el sindicato.

16/5/2009: dos personas resultaron lesionados al caer parte de una obra en construcción en la calle San Nicolás al 800, en Floresta.

24/02/2009 Una medianera que separaba una residencia universitaria y una panadería se derrumbó en el barrio porteño de San Telmo -Chacabuco 1053- sin causar víctimas.

15/12/2008 6 personas sufrieron lesiones al derrumbarse el encofrado de un edificio en Billinghurst 1153, en Barrio Norte.

8/9/2008, un derrumbe en una obra en demolición mantuvo atrapados a dos obreros, que fueron rescatados, en Valle al 1100, en el barrio de Caballito.

Fuente: Diario Z, jueves 10 de noviembre de2011

lunes, 7 de noviembre de 2011

Los derrumbes y la protección de los medios a Macri

Se registraron varios derrumbres desde que el ingeniero Mauricio Macri es Jefe de Gobierno de la Ciudad. A pesar de los reiterados sucesos, las notas periodísticas nunca nombran al líder del PRO y máximo responsable del distrito.

Se derrumbó un edificio de 10 pisos en la Ciudad de Buenos Aires y los medios hegemónicos no mencionan en ningún renglón al Jefe de Gobierno del distrito, Mauricio Macri.


No se trata de señalar un responsable, sino de pensar por qué los medios evitan nombrar a la máxima autoridad competente en la Ciudad.

El Jefe e Gobierno a quien aún no se lo escuchó realizar declaraciones, siempre le deja su espacio al Jefe de Gabinete de Ministros, Horacio Rodríguez Larreta, quién realiza todo aquello que se podría esperar de Macri.

Asimismo, los medios evitan realizar los juicios que sí realizan cuando las problemáticas caen en la órbita del Gobierno Nacional y señalan responsables con nombre y apellido.

En ocasión del trágico accidente del tren que arrolló al colectivo sobre las vías del Sarmiento, el Gobierno Nacional pasó a ser inmediato responsable por la demora en el soterramiento del ferrocarril. ¿Y ahora? ¿El Gobierno de la Ciudad no debería controlar las obras en construcción?

Mientras tanto el nombre de Mauricio Macri, como él, brillan por su ausencia.

Fuente: Diario registrado, lunes 7 de noviembre de 2011

Derrumbe y milagro en el microcentro

El cuerpo de atrás de un edificio de Mitre al 1200 se derrumbó después de que apareciera una grieta. Todos los vecinos fueron evacuados antes. Al lado hay una obra en construcción. Hubo una denuncia previa; para el gobierno porteño estaba todo bien.
“Me acordé de las Torres Gemelas”, contó un vecino del edificio de diez pisos de Bartolomé Mitre 1232, que se vino abajo anoche, poco después de las 20.30. Se derrumbaron dos cuerpos de los cuatro de la enorme construcción, de más de 70 años de antigüedad. Media hora antes, los habitantes habían sido evacuados, lo que evitó que hubiese víctimas. A las cinco de la tarde, el Gobierno de la Ciudad había recibido un llamado que alertaba sobre una profunda grieta en el edificio; acudió la Guardia de Auxilio y dispuso la evacuación inmediata, que abarcó toda la manzana y la vereda de enfrente. Cerca de la medianoche, la zona permanecía acordonada, cortados la luz y el gas, y se esperaba que el resto del edificio, surcado por una impresionante grieta, terminara de derrumbarse o pudiera ser apuntalado. Los vecinos consultados por este diario coincidieron en culpar a una gran excavación que, para edificar, se efectúa en un predio lindero.
El edificio se alzaba en Bartolomé Mitre 1232. “Hasta el momento no hay víctimas porque se evacuó toda la manzana, pero estamos haciendo un censo para saber si falta alguien”, dijo Daniel Russo, director de Defensa Civil de la ciudad, y agregó que “todavía hay peligro de derrumbe de la primera parte del edificio, no así de los edificios linderos”. Esa parte “tiene rajaduras y estamos evaluando su sustentabilidad. También suspendimos la línea A de subtes, en prevención de las vibraciones. Todavía nos quedan muchas horas para apuntalar el primer cuerpo del edificio y asegurarnos de que no se venga abajo”.
Walter Nicolás, subsecretario de Emergencias del gobierno porteño, precisó que se recibió un llamado a las 17 sobre riesgo de derrumbe: “Vino gente de la Guardia de Auxilio, constató las fallas y evacuó rápidamente el lugar. Se vinieron abajo cerca de 30 departamentos”. Susana Freyre, arquitecta del Gobierno de la Ciudad, agregó que “la parte del edificio que quede en pie, habrá que tirarla abajo”.
Algunos de los habitantes “son atendidos por el programa Buenos Aires Presente, ya que perdieron todas sus pertenencias”, agregó un funcionario del gobierno porteño. Russo precisó que las familias afectadas son unas 40 y que la mayoría se trasladaron a casas de familiares.
“Vivo... vivía en el quinto piso –contó a este diario una de las vecinas del edificio caído; estaba con su nene, en uno de los bares de Avenida de Mayo y Salta–. Al lado había un estacionamiento y hace tres meses empezaron a hacer una construcción para cocheras. Cuando empezaron a cavar, yo sentía vibraciones en mi casa. La obra siguió. Hoy, a las siete menos cuarto de la tarde, el encargado tocó a la puerta diciendo que el edificio estaba en peligro y había que irse”. La madre de la joven subrayó que “el pozo de la obra de al lado es enorme. No tendría que hacerse un pozo así al lado de dos edificios de 80 años”.
“Quedó todo blanco por la polvareda, pensé que era neblina, la polvareda –contó el Rafa, mozo en la pizzería La Alameda, sobre Avenida de Mayo–.
Hubo un ruido, pero no como un trueno, más bien como cuando chocan dos autos.” Teresa Fernández, vecina de la zona, contaba que “a varios edificios de por medio, también cayeron escombros” y también cuestionaba la excavación de al lado: “No hicieron muros de contención en los cimientos”. “Yo estaba adentro cuando se cayó –dijo Martín, dueño del negocio de Libertad 99, en la esquina de la casa derrumbada–. Se llenó todo de tierra y caían cascotes en el techo. Estábamos por cerrar, ya teníamos los candados sobre el mostrador y se cayeron al suelo por el temblor. Parecía el 11 de septiembre, las Torres Gemelas.”
Apoyada en la vidriera, en Avenida de Mayo y Salta, había una chica que sólo tenía una cajita de vidrio con aserrín y una ruedita, de esas que se usan para hamsters, pero vacía. La chica miraba al suelo y no quería hablar.
La Agencia Gubernamental de Control del gobierno porteño informó que la obra de Bartolomé Mitre 1218/20, lindera al edificio, tenía una denuncia del 5 de agosto por “ruidos molestos y temblores producto de la excavación”. “Ante el pedido del vecino, la Dirección de Fiscalización y Control de Obras (Dgfyco) inspeccionó el lugar el 26 de septiembre y determinó que poseía todos los planos registrados, estructura, submuración y excavación”. “El arquitecto a cargo de la obra es Ezequiel Mariano Rivarola”, que “hasta el momento no se hizo presente en el lugar y se desconoce su paradero”.

Fuente: Pagina/12, sabado 5 de noviembre de 2011

jueves, 3 de noviembre de 2011

Macri amenazó con triplicar el precio del Subte

Un día antes de la reunión convocada por el gobierno nacional para analizar el traspaso de los servicios del subterráneo y el Premetro a la Ciudad de Buenos Aires, el jefe de gobierno porteño, Mauricio Marci, advirtió que si no se transfieren los subsidios el costo del pasaje aumentaría de 1,10 a 3,30 ó 3,40. "Hoy no tenemos la plata", justificó el mandatario del distrito más rico del país.
 En el mismo tono, Macri resaltó: "Algunos especulan que el traspaso sería sin recursos. Nosotros no queremos especular con nada. (El ministro de Planificación, Julio) De Vido dijo claramente que esto es sin chicanas. Si uno tiene un plan de inversión que lleva adelante y un sistema tarifario, tiene que sentarse a ver cómo evacúa las dos cosas con equilibrio".
"Las redes de subte necesitan ser modernizadas y ampliadas. Hay que sentarse en una mesa a dialogar para ver cómo nos ayudamos en la gestión del subte. Es parte de la tarea que debe tener cada vez más el gobierno de la ciudad autónoma", pidió el jefe de gobierno.
Por su parte, el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, consideró que la transferencia "es una medida en la buena dirección" y evaluó que "sería demasiado burdo, demasiado exagerado" que se concretara sin recursos.

Fuente: Pagina/12, jueves 3 de noviembre de 2011